Normas para roscas de envases y tapas de plástico
Las normas para la fabricación de las roscas de los envases nos ayudan a homologar más nuestros productos en un mundo cada vez más conectado.
La botella para productos de limpieza, también llamada «botella atomizadora» o «botella trigger» se volvió muy popular gracias a su cuello largo y ergonómico el cual permite una gran sujeción del envase.
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La botella atomizadora toma su nombre de la función que tiene esta botella de plástico, la de poder atomizar productos de una forma sencilla y sin complicaciones.
A su característico cuello largo se le suma que el gatillo del atomizador queda a una buena distancia tanto en altura como en separación, permitiendo una aplicación cómoda del producto.
Casi todos los productos para limpiar vidrios utilizan este tipo de botella y aunque su uso no está limitado a esto es el uso más amplio que se le da.
La botella atomizadora está fabricada en Polietileno de Alta Densidad (PAD), por lo que no es un envase blando. También es muy popular su fabricación en Polietilentereftalato (PET) o en Policloruro de Vinilo (PVC).
La mayoría de los grandes fabricantes de productos para limpiar cristales utilizan la botella atomizadora fabricada en PET en combinación con etiquetas termoencogibles para hacer más atractiva la presentación de su producto.
Al igual que otros tipos de envase de plástico o botellas, es posible encontrar la botella atomizadora en diferentes modelos y capacidades pero sin perder su característica silueta.
La botella atomizadora queda muy bien con un atomizador para poder rociar nuestro producto. También es posible usar cualquier tapa ciega (tapas lisas y cortas) en caso de que no se requiera atomizar nada. El uso de la tapa ciega es común cuando se vende el producto como «refill», donde se presume que el consumidor ya cuenta con un atomizador ya que las bombas atomizadoras suelen ser costosas en relación al envase.
La botella atomizadora normalmente se fabrica en una medida estándar de ancho de boca de 28 milímetros con una altura baja (R-28/400) o media (R-28/410). Esto debido a los estándares de los fabricantes de los atomizadores.
Debido a la acogida de este tipo de envases y su gran adopción por parte de la industria, es posible encontrar también envases de menor capacidad con un ancho de boca de 24 milímetros.
Originalmete la botella para productos de limpieza se ofrecía en una medida de 750 ml. Pero poco a poco se fueron introduciendo nuevas capacidades basadas principalmente en onzas fluídas o líquidas (fl. oz.).
Algunas de las medidas más populares serían las siguientes:
Nos encontramos con un envase que cumple perfectamente su función, por lo que realmente no encontramos ninguna desventaja en este producto. Por supuesto su estiba no es posible pero tampoco requerida.
Las normas para la fabricación de las roscas de los envases nos ayudan a homologar más nuestros productos en un mundo cada vez más conectado.
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Las dimensiones de las roscas son las medidas estándar que están regidas por normas para una fabricación homologada de los envases y tapas.
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